Por estos días la rubia vedette está enfurecida con Samuel "Chiche" Gelblung porque se sintió agraviada en el guión de un informe que pusieron al aire en el programa "70-20-11" que emite El Trece los domingos.
Dicho informe aseguraba, entre otras cosas que enojaron a Pradón, que la ex rumbera estaba en su peor momento, sin fama ni dinero y ponía en tela de juicio en algún punto la manera en la que hoy se ganaba la vida.
“Yo no estoy muerta, tengo contratos de trabajo, presentaciones y muchas fechas tomadas para hacerlas, que se informe bien y no diga esas cosas”, dijo anoche Pradón en Ponele la firma.
“Todo esto surgió de una nota de Crónica. Estoy cansada de palos, Chiche quiere tocar tetas, culos...y como no acepté, no fui a su programa. Desde ahí empezó con los informes. Quería que vaya para tocar y ver lo que me había hecho en la cola. Yo no necesito eso", arguyó ella en las últimas horas."Me duele, me lastima que invente cosas porque necesita rating para su programa. No tiene vida, ¡que se compre una!”, agregó.
“Con todo, dice que no hará querella a Gelblung. "Me siento usada, porque si yo no hago nada y él me ataca, a él le sirve. No tiene una vida, yo lo mandé al psicólogo porque tiene muchos problemas con la comida, es bulímico, anoréxico... hacete ver”, disparó.
Recordemos que ya existe un antecedente del año pasado, en el que el programa conducido por Chiche Gelblung había puesto al aire un informe en el que hablaba que Alejandra había caído de un primer piso y no de un séptimo como ella asegura y que en aquel entonces la vedette se encontraba en un departamento de un famoso jugador de fútbol de un club de primera línea que vivía en el mismo edificio.
Pradón les comentó a miembros de su círculo íntimo que esta especie de campaña tiene que ver con la negativa de Alejandra en reiteradas oportunidades de asistir al envío de Gelblung.
FUENTE:PRIMICIAS YA
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